LA DIASPORA POLÍTICA DOMINICANA EN NUEVA YORK

Los políticos dominicanos de acuerdo en NY

Orlando Gil orlandogil@codetel.net.do LOS LOCOS.- La diáspora política dominicana es tan difícil de bañar como un loco del antiguo 28, y a la de Nueva York, por ejemplo, hay que sacarle su agua y jabón apartes. Las incidencias de las pasadas elecciones, si se escribieran, darían para llenar libros, y analizar los resultados es una tarea pendiente. Los perredeístas, y es bueno resaltarlo, tal vez se mantengan al margen de esas dilucidaciones, pues rindieron como nunca antes. Dejaron a los peledeístas atrás, y no solo en cuanto a las presidenciales, sino también en los diputados de ultramar. Entre los oficialistas hay chismes de todos los colores, pero sobre todo se habla de la confabulación para favorecer al candidato Carlos Gómez, quien se postuló en la boleta del Partido Reformista Social Cristiano. La situación fue muy clara. Cada voto a favor de Gómez iba en detrimento de los aspirantes peledeístas. Con razón el PRD sacó más diputados y el PLD apostaba a lo contrario. El asunto es más grave, puesto que esa inclinación no fue por simpatía, sino que el dinero corrió, aunque no llegó a todas las manos…  LOS COJOS.- Esos políticos de la diáspora dominicana cojean, al igual que los de aquí, por costumbre, sin tener padecimientos en los pies. Sin embargo, en ocasiones se esfuerzan y caminan derecho. Ahora, por ejemplo, está dándose en Nueva York un fenómeno raro, pero alentador. Todos los partidos confluyen en un mismo fin: La selección de Adriano Espaillat como candidato en las primarias Demócrata del próximo martes. Han entendido como histórica la posibilidad de tener un representante en Washington, y resulta hasta inspirador ver como sus dirigentes se reúnen en un mismo salón y unifican criterios y promueven de común acuerdo a Espaillat. Los resabios de la política vernácula, a pesar del recién proceso, se quedaron atrás, y quienes antes pensaban como perredeístas, peledeístas, reformistas, y demás nomenclaturas, ahora lo hacen como dominicanos. O si se quiere, como neoyorquinos. Esto es, que hay un sentido de comunidad, y eso es importante, puesto que si los llamados dominican-yorks se organizan políticamente y constituyen una fuerza real, los beneficios no se harán esperar…  LA VENTAJA.- La verdad que los políticos de la isla, incluyendo los medios que llegan a Nueva York, se mantienen -- casi todos -- ajenos a un evento tan auspicioso. Las posibilidades son inmensas, tanto como reales. El distrito No. 13 por el cual se postula Adriano Espaillat es mayormente latino (54 % contra un 27 % afroamericano), y entre los latinos, los votantes dominicanos llevan la delantera. Son los más. Solo falta, entonces, que ejerzan a conciencia su derecho y lo hagan por uno de los suyos. Incluso, la gran prensa de la urbe, como The New York Times, ha publicado infinidad de reportajes sobre la oportunidad de los dominicoamericanos de hacerse con ese escaño. No basta con ser un núcleo de gran pujanza económica, o sus atletas decisivos en los estadios, o imponer música de mucho colorido como la bachata, y hasta mejorar la culinaria. Ahora se trata de tener influencia política, de acceder a los poderes públicos de manera directa. De que la Cenicienta se ponga el zapato y se convierta en princesa. Dicen el refrán que “nunca es tarde, si la dicha es buena”…  LA DICHA.- La dicha es buena porque ha logrado lo impensable: que los políticos dominicanos en Nueva York se hayan puesto de acuerdo, olvidando parcialidades y pensando en el bien de la comunidad. Que a una impulsen una candidatura y exista la posibilidad de que un dominicano alcance un escaño en el congreso norteamericano. Adriano Espaillat, dicen quienes lo conocen de años, es excelente para el cargo, ya que cuenta con experiencia de legislador. Estuvo en la Asamblea y también en el Senado del Estado. Incluso, merece destacarse que el 13 es un distrito nuevo y que abarca a Washington Heights, Inwood, Hamilton Heights, Harlem, El Barrio y gran parte del Oeste del Bronx. Además, es la primera vez que las primarias de NY se celebran en Junio. Anteriormente era en Septiembre hasta que la Corte Suprema del Estado la adelantó. De manera que las condiciones están dadas como nunca antes. Todo depende de que la comunidad entienda la importancia y se motive en ir a votar por Espaillat. El martes 26 será un gran día… Fuente:Listin diario