Autor
Dr. Pedro J. Ferbel Azcarate
El Dr. Pedro J. Ferbel Azcarate, Estadounidense, es antropólogo y arqueólogo, doctorado por la Universidad de Minnesota, Estados Unidos. Desde 1993 hasta 1999 trabajaba en la República Dominicana como investigador principal, instructor y curador del Archivo Histórico de Santiago, y director de muchos proyectos arqueológicos y ecológicos, como el Proyecto Arqueológico de Chacüey, Caballo Loco Tours, y La Ruta de Colón. Es un charlista y escritor de la herencia taína y está muy activo en su comunidad con la cultura latina y asuntos sociales.
Introducción
Históricamente, la identidad nacional de la República Dominicana ha sido basada en los relatos del Colonialismo Español acerca de la extinción de la gente indígena y en las ideologías del progreso y la civilización que están ubicadas dentro de la visión de la Hispanidad y Catolicismo.
Así que los dominicanos están
desconectados de sus antepasados y de su herencia cultural indígena, africana
y afro-mestiza criolla. [1] En esta ponencia, estoy evaluando la
sobrevivencia de la cultura Taína basando el trabajo en dos estudios
importantes: "La Herencia Indígena en la Cultura Dominicana de Hoy"
de Bernardo Vega (1981), e "Indigenismo, Arqueología, e Identidad
Nacional" de Manuel García Arévalo (1988).
Mis estudios sugieren que hay herencia
cultural significativa de origen Taíno que ha persistido hasta hoy en día.
Esta herencia, junto a las pruebas históricas de la sobrevivencia Taína
presentada por mis colegas Lynne Guitar y Jorge Estévez, me ha llevado a la
conclusión de que el pueblo Taíno nunca ha sido extinguido, pero sobrevivía
en los márgenes de la sociedad colonial hasta el presente. [2]
Hoy en día, como profesores,
investigadores y estudiantes, tenemos que tomar la responsabilidad de re-examinar
críticamente la historia de la extinción Taína desde un punto de vista lejos
de la política racista y agendas nacionalistas. En esta manera, podemos abrir
la puerta para que todos los dominicaños puedan entender su propia historia,
identificar con sus propios ancestros, celebrar su cultura tradicional, y
utilizar esta conociencia pare encontrar un camino que conduce a un futuro
post-colonial.[4]
Herencia Cultural Taína Mi conocimiento de la herencia cultural Taína viene de cinco años trabajando en el Cibao, en la región noroeste de la Republica Dominicana. Yo vine por primera vez a la República Dominicana en 1992 para hacer investigaciones sobre la conmemoración del quintocentenario de Colón. En aquel tiempo, yo asumí que lo que leía en los libros y revistas sobre la extinción de los Taínos era la verdad. Se ve los indios en formas romantificados, petrificado en el pasado pre-Colombino, congelado en tiempo (Figura1).
Entonces yo me sorprendí cuando vi muchas formas culturales fuertemente Taíno en la vida cotidiana dominicana, en particular en el campo (Figura 2). Pero también me di cuenta de la ironía y contradicción de muchos Dominicanos quienes practican y viven en maneras culturales Taínas pero no están identificados con esa cultura. De hecho, esa gente tenía vergüenza de esta cultura porque pensaba que la cultura indígena es primitiva y subdesarrollada.
Al mismo tiempo, la herencia arqueológica estaba destruída y olvidada (Figura 3), la historia y la cultura eran tópicos de interés solamente para la gente de clase alta, y había pocos recursos disponibles con que las comunidades podían desarrollar sus actividades culturales tradicionales. Comencé a entender como la cultura tradicional de Quisqueya existía en oposición a las realidades económicas de la "modernización". En otras palabras, desarrollo hacia una economía moderna significa movimiento fuera de la cultura tradicional dominicana y la herencia Taína.[5]
"Herencia" puede definirse como el legado cultural y biológico que la gente contemporánea ha llevado en su pasado ancestral y que forma una parte de su identidad comunal en el presente. La herencia Taína esta ubicada en la Republica Dominicana en muchas formas, incluyendo el idioma, agricultura, comida tradicional, conocimiento medicinal y de las hierbas, tecnologías, artesanías, arquitectura, creencias espirituales, vida familiar, fiestas, cultura popular y genes sanguíneos (Ferbel 1995;García Arévalo 1988; Vega 1980; Weeks y Ferbel 1994). Esta herencia Taína ha sido pasada de generación en generación con orígenes de gente de lengua Arahuaca quienes emigraron al Caribe desde el valle del rió Orinoco unos 1,500 años antes de la colonización Española. Los arqueólogos creen que había una cultura Taína distinta, desarrollada en el Caribe por el año 600 B.C. y floreció por 900 años antes de Colón (Rouse 1992; Weeks y Ferbel 1994). Con el entendimiento de esta escala de tiempo, no es sorprendente que los Taínos tenían una cultura bien plantada con un entendimiento profundo del paisaje y medioambiente del Caribe. El impacto de la Colónización Europea del siglo XV fue devastador para los Taínos y cambio drásticamente la estructura de sus modos de vida. Confrontados con enfermedades mortales extranjeras, forzados en sistemas dominantes de poder social, económico y político, se les perdieron sus derechos a la tierra, a la expresión libre y en muchos casos a la misma vida, los Taínos tenían que crear maneras radicales para sobrevivir. La resistencia tenía muchas formas. Muchos Taínos peleaban contra los invasores que tenían ventaja, pues venían con armas de fuego, espadas, caballos, perros, y trampas. Muchos Taínos se escondieron en comunidades aisladas cimarrones, junto con esclavos Africanos fugados, lejos de los pueblos Coloniales y plantaciones. Otros estaban forzados en esclavitud y posiciones de trabajo, y Vivian lado a lado de los africanos y españoles. Una estrategia para sobrevivir es la invisibilidad. Los Taínos no mostraban su identidad y así podían sobrevivir en su nueva situación. [6] El historiador dominicano Frank Moya Pons (1992:137) muestra que durante el período de la colonización Española, comenzó un proceso de "transculturización" donde los Taínos se mezclaron con la población española, junto con esclavos Africanos, dando luz a una nueva cultura criolla. Se muestra en el censo de los archivos de 1514 que 40% de los hombres españoles tenían esposas Taínas (Moya Pons 1992:135). Interacciones entre Africanos y Taínos están documentadas en archivos de plantaciones y en descripciones de comunidades cimarrones (García Arévalo 1990:275). Más allá, la historiadora Lynne Guitar (1998) muestra la marginalización histórica de los Taínos, comenzando con los escritos del Padre de Las Casas en el siglo XVI. Se declararon extintos los Taínos en documentos oficiales—con el propósito de legitimar el control colonial y para racionalizar la importación de esclavos Africanos. Al mismo tiempo, referencias de indios y Taínos continuaban apareciendo en testamentos y procedimientos legales, mostrando su sobrevivencia en la sociedad colonial.[7] A través del tiempo, una población campesina, pobre pero con tierra, se desarrolló del grupo original de indígenas, Africanos y Europeos. Ellos continuaban compartiendo cultura y sangre, haciendo sus propias comunidades. Como éstas comunidades estaban luchando para sobrevivir en la tierra, ellos tenían que usar todo su conocimiento cultural. Naturalmente ellos buscaban su herencia Taína, porque representaba muchas generaciones de sabiduría, tradición, e historia oral de la tierra. Esto aún sigue para los dominicanos de hoy, especialmente en el campo agrario. La próxima sección de este papel intenta dar un resumen parcial de la herencia Taína para mostrar la fuerza cultural que sigue existiendo.[8] Ejemplos Lingüísticos de la Herencia Taína La República Dominicana usa el nombre indígena "Quisqueya" como referencia a su país. A los dominicanos les gusta llamarse "Quisqueyanos". Este nombre también aparece en las primeras palabras del Himno Nacional Dominicano: "Quisqueyanos valientes..." [9] El idioma español tiene unos centenares de palabras que vienen del idioma Arahuaca indígena del Caribe. Esas palabras son más que nombres de objetos, lugares, flora y fauna que no existían en el idioma español, por ejemplo canoa, huracán, hamaca, caimán, barbacoa, tabaco, maraca, iguana, manatí. También hay muchas palabras y expresiones que son indígenas en origen y que se usan comúnmente, como; mabí (un jugo natural), macana (arma de policía), y macuto (mochila de mano). La frase Taína "un chin" o "chin-chin" significa una cantidad pequeña, y es tan común como la frase española "un poquito". El uso de esas palabras y expresiones sugieren una relación compleja entre las culturas.[10] Muchos, o tal vez la mayoría, de las ciudades, campos, ríos, y lomas de la isla llevan nombres indígenas, incluyendo: Amina, Bao, Bonao, Cotuí, Cutupu, Dajabón, Damajagua, Guajaca, Guayubín, Inoa, Jacagua, Licey, Magua, Maguana, Mao, Nagua y Samaná. La majaría de los ríos tienen nombres Taínos, incluyendo: Haina, Maimón, Ozama, Sosua, Tireo, y Yaque. La mayoría de los árboles y frutas tienen nombres Taínos como: Anacajuita, Caimito, Cajuil, Cana, Caoba, Ceiba, Cuaba, Guacima, Guaño, Guao, Guayaba, Guanábana, y Guayacán. Además de flora, hay cientos de insectos, aves, peces, y otros animales conocidos por nombres Taínos. Incluyendo: Bibijagua (hormiga), Comején (termita), Carey (tortuga marina), Hicotea (tortuga de rió), Guaraguao (águila) y Haiba (cangrejo).[11] A través del proceso de mestizaje, donde los hombres españoles colonizadores buscaban esposas Taínas, se formó un sistema de patriarquía. Por esta razón los apellidos Taínos no sobrevivieron. Pero los dominicanos usan nombres históricos de los Taínos para sus hijos. Ejemplos incluyen los políticos Caonabo Polanco y Hatuey Deschamps; y el músico Guarionex Aquino.[12] Muchos Dominicanos pueden distinguir un nombre Taíno por su sonido. Puede ser que el dialecto Dominicano de transformar palabras con terminación "-ado" hacia el sonido "ao" es un vestigio de pronunciación Taína (colorado = colorao). Sin embargo, de su verdadera historia, es cierto que existe una asociación romanizada con estas pronunciaciones de los campesinos y Taínos. Otro ejemplo es el uso de la "i" con palabras que terminan con una "r" (calor = caloi).[13] Es interesante que algunas palabras Taínas que se usan en otras partes del Caribe no se usan en la República Dominicana—se usan palabras españolas. Lechosa es un ejemplo. La palabra indígena es papaya. Aquí se usa la palabra española piña, y no la palabra indígena, yayama, y la palabra española cotorra en lugar de la indígena iguaca. Sin embargo, mucha gente sabe los nombres indígenas aunque no las usan. Hay algunos ejemplos donde se usan las dos palabras—indígenas y españolas—intercambiablemente, como la palabra española tarántula y la palabra Taína cacata (Figura 4). [14]
Algunas palabras indígenas han cambiado
a través de los años, por ejemplo, un batey que originalmente describió una
plaza ceremonial Taína, hoy día se refiere al lugar residencial de los
haitianos en un ingenio de azúcar. Guácara originalmente se refería a una
cueva o caverna y ahora describe un lugar o cosa de antigüedad. [15]
Agricultura Muchos términos de agricultura tradicional tienen orígenes Taínos. La palabra conuco, aunque perdió su significado como un método de cultivo mixto parecido a la milpa indígena de América Central, ha retenido el concepto como un pedazo de tierra que se usa para la agricultura.
Es lamentable que los Dominicanos no
han retenido el uso Taíno de montones o de agricultura elevada, y sufren de
uno de los peores casos de pérdida de subsuelo en el Caribe (Ferguson, 1992).
También es lamentable que los Dominicanos han usado demasiado la técnica
"corta y quema".[16]
Muchos agricultores Dominicanos usan lo
que se llaman los misterios o secretos espirituales de las plantas,
incluyendo sembrando con el ciclo de la luna. Los Taínos también tenían un
alto entendimiento de los ciclos de la naturaleza. Ese conocimiento agrícola
se pasa de generación a generación. Es interesante ver que en algunas
regiones, el día de la semana en particular influencia cuando es un buen día
para sembrar. Esta práctica puede ser una manera transcultural de entender la
división espiritual del mundo humano. Un ejemplo final de la agricultura que
viene de tiempos precolombinos es el uso de la coa, que es la palabra
indígena para un palo de sembrar que se usa hoy en día, aunque con punto de
metal. [17]
Yuca y Casabe El tubérculo almidonado yuca es una parte central de la dieta contemporánea dominicana. Yuca dulce es un vívere, sancochada y servida por el desayuno y la cena muchas veces con huevos o un poquito de carne. Yuca crece bien en el suelo y también en la vida del Caribe. Puede crecer en lugares áridos y en las colinas. Este se conserva en el suelo por unos meses sin pudrirse. Esta era la clave para la sobrevivencia de los Taínos. Si venía un huracán, la yuca no era afectada bajo de la tierra. Uno de los dioses principales de los Taínos era Yucahuguama mariocati—su nombre muestra la importancia de la yuca a los Taínos. Los Dominicanos modernos se identifican con la yuca como lo más dominicano de sus víveres, al igual que los Taínos en el pasado.[18]
Preparando pan de casabe de la harina
de yuca amarga es una tradición dominicana que tiene una fuerte conexión al
pasado Taíno. Aunque era común en el pasado preparar casabe en las casas
particulares, hoy la producción de casabe es principalmente para panaderías y
pequeñas industrias que llevan su casabe a bodegas locales para todo el país.
La tecnología en la producción de casabe no ha cambiado mucho a través de los
años, y mucho de la terminología es igual que la de los Taínos. Se ralla con
guayos (hoy usan cucharas y cuchillos para pelar la yuca y ralladores
mecánicos), se cuela en un saco de cana (capacho) para eliminar el ácido
ciogénico (anaiboa o almidón), que se colecciona dentro de hojas de palma en
forma de canoa. La masa se pone a secar. Se cierne en
un cedazo para preparar la harina (la catibía). Después, la harina se
extiende encima de un burén con fuego abajo por diez minutos cada lado, hasta
que esté bien quemadita (Figura 5). Se puede conservar casabe en esta forma
por muchos meses. Así es un buen producto alimentario en un medioambiente
húmedo tropical. Siempre hay casabe por la temporada navideña y la pascua, y
está presente en la mesa dominicana. Es importante notar que en años
recientes la disponibilidad de pan hecho de harina de trigo ha disminuido el
uso de casabe en la dieta dominicana.[19]
Usos alternativos de harina de yuca han
bajado en los últimos años, aunque unos productos todavía están en uso.
Panecicos son palitos de harina de yuca con manteca de puerco, y se
consideran una especialidad del Cibao. Las empanadas dominicanas se hacen
muchas veces con masa de harina de yuca. Bolas de yuca se preparan fritas.
Jojaldras son polvorones hechos de almidón de yuca. [20]
Cultura de la Comida y Uso de Tabaco Mas allá de yuca hay muchos frutos y vegetales de origen indígena que se usan en la dieta dominicana. Esos incluyen guayaba, guanábana, piña, lechosa, yautía, batata, maní y ñame.
Otros frutos y vegetales que la gente
come, pero son menos comunes, son el anón, mamón, caimito, jagua, jobo, y
muchos otros. Ajíes son un ingrediente esencial para las habichuelas, y el
popular salcocho dominicano que parece relacionado con la sopa indígena que
se llama ajiaco.
Arepas parecen que son de origen
indígena, y la sazón bija (achiote) es puramente indígena. El uso de esta
especia roja ha bajado con la disponibilidad de sazones en paquetes y salsa
de tomate enlatado.[21]
Cocinando en ollas de barro parece ser
un estilo Taíno, aunque es más y más raro hoy. Es una manera de cocinar en
que las habichuelas salen con más sabor.
La palabra bucán describe la técnica de
ahumar carne, y la palabra barbacoa es bien conocida como una manera de
cocinar carne. Todas las técnicas vienen de los Taínos.[22]
Vega (1987:100-101) documenta el uso de
otra raíz indígena. Igual que la yuca, con la guáyiga se prepara un pan que
se llama cholo, popular en el sur. Otra raíz, guayaro o ñame silvestre,
aparece por todo el Cibao, aunque es poco conocido[23]
Los términos mabí y cacheo describen
bebidas sin alcohol que tienen origen indígena que se producen con bejucos y
palmas fermentadas.[24] El
tabaco viene de la cultura indígena y
tiene un uso muy amplio en la República Dominicana, especialmente en el campo
hoy en día. El tabaco es una parte integral de las ceremonias espiritistas.
Fumándolo es como una ofrenda para los muertos y los santos.
También se usa en los cementerios y
para adivinar el futuro. La industria del tabaco es una industria fuerte en
la República Dominicana, y el consumo es alto por todo el país. Dominicanos
fuman cigarros, puros y pipas; muchas tradiciones del uso de tabaco incluyen
enrollar su propio tabaco (túbanos), o fumarse un tabaco compacto llamado
anduyo en una pipa (cachimbo) o enrollado en papel de maíz
(pachuche). [25]
Medicina Natural El conocimiento de la medicina natural viene por tradición oral. Mucho entendimiento de las propiedades de las plantas y maneras de saneamiento tienen una asociación Taína. Ejemplos de usos son numerosos, incluyendo el uso de hojas de calabaza para el dolor de dientes e hinchazón, el jugo de la cepa del maguey como antibiótico, y la hoja de guayaba para nausea. El tónico popular, mamajuana, tiene ingredientes como el bejuco de indio que tiene propiedades energéticas y estimulantes.
Hay verbalistas y curanderos en cada campo, pero también
casi todos los viejos saben algo de su propia experiencia con las plantas
medicinales. Lamentablemente, en los años recientes, la gente está buscando
drogas alopáticas y tratamientos rápidos en vez de los naturales.[26]
Pesca
Las maneras de pescar indígena han sido
bien documentadas por Vega (1987:105-106). Estas incluyen el uso de corales,
envenenamiento temporáneo de ríos pequeños y charcos (algunas veces con el
almidón de la yuca amarga), el uso de redes (nasas), y otras técnicas para
localizar pescados y mariscos en aguas bajitas. Los siguientes peces y
animales marinos tienen nombres Taínos: Carite, menjua, conjinua, jurel,
dajao, guabina, macabi, tiburón, guatapana, lambí, burgao, y juey. En los
últimos años, la pesca ha disminuido en su importancia debido a las presas,
erosión de suelo y contaminación en general.[27]
Artesanías y tecnología Cerámicas locales usan formas básicas de orígenes transculturales. Muy popular en el campo contemporáneo es el uso de tinajas, que son envases grandes para guardar agua. Alguna gente todavía conserva la tradición de poner una piedra indígena (piedra de rayo) en el fondo de la tinaja para proteger la casa y para mantener el agua limpia. Hay también vasijas redondas para cocinar, que se llaman ollas. Con la disponibilidad de cubos plásticos, y envases y ollas de metal, el uso de cerámicas en la cultura dominicana está bajando.[28]
Los Taínos tenían una tradición muy
fuerte de carpintería y artesanía de madera. Los dominicanos se les pierden,
progresivamente, sus habilidades de trabajar con la madera. Esa realidad es
debido a la deforestación y la falta de muchas maderas finas, como la caoba y
el ébano. Aún hay una producción de muebles finos que incluye mecedoras, que
son bien conocidas, y sillas que están disponibles para visitantes y en las
casas hasta los más pobres.[29]
Bateas son envases planos que se usan
para cargar frutas. Su origen es Taíno y muchas veces están asociados con la
lavo de oro en los ríos. Estas se siguen usando cuando el precio del oro
sube. Las bateas, igual que las cerámicas, se usan menos por la llegada de
envases plásticos. Los artesanos de bateas no tienen
madera dura, y por eso tienen que hacer bateas de menos calidad que antes.
Algunos están experimentando para el
mercado turístico, haciendo cucharas y tenedores decorativos de madera. Es
interesante ver que la palabra batea aún se usa para las poncheras
plásticas.[30]
Hay lugares por la costa y ciénaga
donde gente todavía fabrica canoas y cayucos, embarcaciones chiquitas. La
manera de hacer una canoa de una palma real, como un abrevadero para las
vacas y puercos, está todavía en práctica en algunos campos. Esta tecnología
es más y más rara porque es más fácil cortar ruedas de camión para la misma
función. Es también interesante que esos abrevaderos se llaman canoas (Figura
6).[31]
Calabazas que se llaman higüeros, el
nombre indígena, son de diferentes tamaños y formas, y los campesinos los
usan como vasos para agua, tazones y envases (Figura 7). Macutos, bolsas de
fibra de guana o cana, aún se usan, pero son menos apreciados por la disponibilidad
de sacos de plástico y papel. Canastas hechas de bejuco, palmas, cabuya, y
otras fibras nativas, se usan para envases. Fibras de cabuya aún se usan para
hacer sogas y látigos, pero fibras sintéticas son cada vez más populares. El
uso de algodón nativo ha desaparecido con la importación de tela. Las hamacas
están hechas hoy con hilo de nilón, y las venden a los turistas. Para
dominicanos, las camas han desplazado las hamacas. Finalmente, los carniceros
usan fotutos, las “trompetas Taínas” que son caracoles de lambí, para indicar
que tiene carne fresca y de qué tipo. Pero eso también está desapareciendo
como una forma cultural.[32]
Arquitectura
La palabra bohío describe una casa campesina con techo de cana y paredes de yagua (palma real), que tiene orígenes Taínos. También describe un rancho, patio o estructura que tiene techo de cana o palma típica. Los bohíos tienen forma circular, como el caney indígena. Pero también pueden ser construidos en una forma rectangular. Cana se usa, si esté disponible, porque resiste el agua y dura hasta veinte años; además tiene propiedades de ventilación. También un techo indígena se aprecia por su belleza y se usa en discotecas, restaurantes, hoteles, y galleras. Bejucos pueden ser usados para enganchar una estructura, pero los clavos son más comunes. Además casa hecho de yagua de la palma real son Taina en origen (Figura 8).[33]
Folclor y
Espiritualidad Popular
Hay muchas asociaciones con la herencia indígena en el folclor y la espiritualidad popular de los Dominicanos. Espíritus Taínos se reportan bañándose en ríos y caminando en las cuevas por todo el país. Muchos lugares de belleza natural o particularidad geológica están asociados con lugares indígenas o lugares de saneamiento. Muchos charcos en los ríos tienen nombres como El Charco de los Indios, y cuevas tienen nombres como Cueva de los Indios. A veces hay folclor alrededor de esos lugares, que son sitios peligrosos o sitios de saneamiento, y hay que respetarlos.[34]
Los sistemas de creencias sincréticas
combinan imágenes indígenas dentro de ofrendas, altares y ritos. En botánicas
se venden estatuas y velas con formas de indios para atraer suerte. Hierbas y
flores como el copei y el tabaco se queman como incienso en contextos
espirituales. Se usan pulseras en los bebés para protección. Piezas
arqueológicas de los indígenas se usan en altares.[35]
Hay muchos cuentos de orígenes
indígenas como la ciguapa, espíritu con pelo largo y con pies al revés, que
camina por las noches asustando a la gente. [36]
Arte, Poesía y Literatura En los campos de arte, poesía y literatura, los dominicanos han usado muchos temas indígenas (García Arévalo 1988). Trabajo de pintores cibaéños como Luis Muñós, Bottín Castellanos, y Gina Rodríguez usan temas Taínos y tecnología indígena en sus expresiones artísticas. Temas indígenas también aparecen en obras de poesía, literatura teatral y danza moderna. El merenguero Juan Luis Guerra, por ejemplo, usa muchos temas indígenas en su música—por ejemplo, hay una obra reciente que se llama Areito, nombre Taíno para una fiesta. En muchas canciones hace referencias a los Taínos, incluyendo los caciques Enriquillo y Anacaona. No podemos olvidar que el merengue y la bachata llevan instrumentos y ritmos indígenas, como es el uso de la güira.[37]
Identidad Popular
Tal vez la asociación más fuerte con el pasado indígena viene con el rasgo biológico conocido como el color "indio". Muchas cartas de identidad oficiales usan el término trigueño para describir el color de la mayoría de los Domicanos. Pero la palabra indio es el concepto más común para la tez Dominicana y de la raza de su gente. Este término, popularizado por Trujillo para separar los dominicanos de sus vecinos Haitianos, no es una palabra que trata de la herencia indígena, sino es una definición de la manifestación de ser criollo o multibiológico.[38]
Dobal (1989:25) escribió sobre
cualidades físicas indígenas, temperamentos y sensualidad del origen Taíno, y
sugiere que el pelo largo y lacio, ojos marrones y grandes, y la piel suave
de las campesinas son de origen Taíno. Aunque estas descripciones parecen
obvias por Dobal, las características físicas son subjetivas y no son
confiables para interpretar generalizaciones culturales. También es muy
difícil usar las descripciones que nos dejaron los españoles para describir
la belleza física de los Taínos y entender como ellos parecían. Sin embargo,
los rasgos físicos de una comunidad cultural son muchas veces conocidos por
sus miembros. Muchos dominicanos piensan como Dobal que saben la fisonomía de
los Taínos y la herencia biológica en los dominicanos de hoy.
Dobal sigue explicando que el
dominicano tiene la herencia indígena por su amor a la libertad, la falta de
ambición, el amor a su patria y el lugar de su nacimiento (Dobal 1989:26). La
fortaleza y bravura es una cualidad de los Taínos asumido por los
Dominicanos, y muchos campos que se conocen por el coraje de su gente son
sitios donde se dice había mucha gente indígena.
La matrifocalidad es una característica
descrita en documentos sobre los Taínos y que aún existe. Tal vez es el amor
matrifocal que sugiere Dobal de estar en el lugar donde nació y creció.[39]
En la Republica Dominicana, las
oportunidades históricas y contemporáneas de casamientos entre individuos de
diferentes herencias Africanas, indígenas y Europeas han sido muy altas y han
producido muchas mezclas biológicas en la población. Hay variaciones
tremendas en rasgos "raciales", por ejemplo, textura de pelo, color
de piel, y forma de cara. Los dominicanos conocen y hablan de la biología,
diciendo que algunos parecen más "Negros", otros más
"blancos", y otros más "indios". En este sentido, los
Dominicanos son parecen como un pueblo multibiológico. No obstante, muchos
dominicanos tienen combinaciones de rasgos raciales que lo hacen muy difícil
saber su linaje biológico. Los dominicanos han inventado nombres de más de
veinte diferentes apariencias físicas incluyendo: trigueño, indio, indio
claro, indio oscuro, canelo, pinto, etc. Estas descripciones físicas no están
basadas en ningún conocimiento de su descendencia biológica. O sea, en la
misma familia apareces personas de diferentes colores. Es decir, no existe
una cultura distinta negro-dominicana, indio-dominicana o blanco-dominicana.
Si, existen diferencias regionales, pero en general las diferencias
culturales son más fuertes dentro de los dominicanos ricos y pobres, y dentro
de los Dominicanos de la ciudad y del campo, y esas diferencias no son tan
grandes cuando se busca una identidad cultural común.
En conclusión, podemos ver que la
cultura es más fuerte que el color de la piel. Y así es en otras comunidades
indígenas contemporáneas como los Lumbee, Haliwa, Pequot, Lakota, Cherokee etcétera, donde gente mezclada son
igualmente indigena como los de supuestamente “sangre pura.” [40]
Cultura Popular
La imagen del Taíno se romantiza en la cultura nacionalista y capitalista Dominicana. El gobierno usa caciques Taínos como héroes nacionales en sellos y en la moneda. Hay imágenes que se usan en esculturas, en edificios, que muchas veces muestran esclavos encadenados.
Los indios son denigrados como mascotas
vendiendo los siguientes productos: Soda Enriquillo, saladitas Guarina, ron
Sibonei, galletas Hatuey.... El nombre Taíno es un adorno para los negocios.
Una cerveza popular se llama Quisqueya. Para muchos dominicanos esos
productos son la asociación más conocida de su pasado indígena. Al mismo
tiempo, había imágenes hispanas para promover la identidad Dominicana.
Cristóbal Colón es un héroe nacional oficialmente (Figura 9). [41]
Pero también muchos dominicanos piensan
que es mala suerte (un fucú) decir el nombre de Colón.
La Isabela, una de las primeras
Colonias Españolas, fundadas por Colón en la costa norte de la isla, tiene
espíritus malos españoles. Estos ejemplos pueden ser interpretados como
rechazos de la identidad española. Durante una protesta contra el
quintocentenario, había literatura distribuida que decía "...vamos a
conmemorar la resistencia indígena, negra y popular en la llegada de
Colón" (Ferbel 1995:202) En ese tiempo yo vi una imagen que parecía
simbólica de la identidad popular: San Miguel, vestido como un indio, con
pelo largo y piel de color indio, estaba peleando contra el diablo, el cual
tenía la cara de Colón y sus alas eran banderas de España y los Estados
Unidos (Figura 10).[42]
Conclusión En un sentido, la colonización española estaba victoriosa: declaraban que los Taínos estaban extintos y surgió una ideología nacionalista hispana que ha dominado discusiones de la identidad del país. Pero, con una reexaminación mas enfocada en la persistencia de formas culturales con orígenes Taínos, vimos su fortaleza. Las raíces de la cultura tradicional Dominicana son verdaderamente Taínas. Los dominicanos quienes reflexionan sobre la extinción de los Taínos que aprenden en las escuelas y en la cultura nacionalista, entienden que es un cuento parcial de su identidad. El profesor Dominicano Antonio de Moya (1993:10) escribió que "El genocidio Taíno es la gran mentira de nuestra historia... los Taínos dominicanos siguen viviendo 500 años después del contacto europeo".[43]
El camino que tomará la identidad Taína
en la República Dominicana dependerá en dos factores: primero, la resistencia
de los elementos culturales indígenas en contra de la cultura del Oeste, la
cultura de desarrollo y globalización, y segundo, el trabajo de individuos y
comunidades motivadas de examinar críticamente la composición de su
identidad.[44]
Mi entendimiento es que la
identificación con la herencia tradicional viene de la enseñanza de las
madres y abuelas a sus hijos y nietos, del compromiso de los individuos en su
comunidad, y del amor y respeto por el espíritu de la tierra donde la gente
nace y ama a su hogar. Tal vez no es una cosa fácil para los dominicanos,
Colonizados por años, viviendo en una nación "subdesarrollada" bajo
un orden global. Como decimos en el Cibao, “No es fácil, compai’!” Pero para
"Quisqueyaños valientes" con gran espíritu y siglos de resistencia,
es tan natural decir, "No hay más na. ¡Hay que echarpa’lante!"[45]
Referencias Antonio de Moya, E. (l993). Animación sociocultural y polisíntesis en la transformación del sistema educativo Dominicano. La Revista de Educación1(2): 6-10. Barreiro, Jose (1989). Indians in Cuba. Cultural Survival Quarterly13(3):56-60. Dobal, Carlos (1989). El retrato de Espaillat y otros estudios históricos. Publicaciones ONAP, Santo Domingo. Ferbel, Peter J. (1995). “The Politics of Taíno Indian Heritage in the Post-Quincentennial Dominican Republic: When a Canoe Means More than a Water Trough.” Ph.D. Diss., University of Minnesota, Minneapolis. Ferguson, James (1992). The Dominican Republic Beyond the Lighthouse. Latin American Bureau, Washington D.C. García Arévalo, Manuel (1988). Indigenismo, arqueología, e identidad nacional. Museo del Hombre Dominicaño y Fundación García-Arévalo, Santo Domingo. Guitar, Lynne (1998). “Mything in Action”. Native Peoples. Vol. 12(1): 75-76. Moya Pons, Frank (1992). The Politics of Forced Indian Labour in La Espanola 1493-1520. Antiquity 66:130-139. Rouse, Irving (1992). The Taínos: Rise and Decline of the People who Greeted Columbus. Yale University Press, New Haven. Thomas, D.H., Ed. (1990). "Transculturation in Contact Period and Contemporary Hispaniola". InColumbian Consequences, Volume 2: Archaeological and Historical Perspectives on the Spanish Borderlands' Past, pp 269-280. Smithsonian Institution Press. Washington D.C. Vega, Bernardo (1981). La Herencia Indígena en la Cultura Dominicana de Hoy. In Ensayos Sobre Cultura Dominicana, pp. 9-53. Museo del Hombre Dominicano, Santo Domingo.(1987). Santos, shamanes y zemíes. Fundación Cultural Dominicana, Santo Domingo. Weeks, John M., P. J. Ferbel, K. Liss, F. Rosario, V. Ramirez (1994). Chacuey Archaeological Project: Report of the 1993 Investigations. Manuscript on file at the Museo del Hombre Dominicano, Santo Domingo. -------------------- Autor
Dr. Pedro J. Ferbel
Azcarate,
estadounidense, es antropólogo y arqueólogo, doctorado por la Universidad de
Minnesota, Estados Unidos. Desde 1993 hasta 1999 trabajaba en la
República Dominicana como investigador principal, instructor y curador del
Archivo Histórico de Santiago, y director de muchos proyectos arqueológicos y
ecológicos, como el Proyecto Arqueológico de Chacüey, Caballo Loco Tours, y
La Ruta de Colón. Actualmente es profesor de la Universidad de
Pórtland, co-redactor del website Caribbean
Amerindian Centrelink y co-redactor de su revista
electrónica Kacike. Es un
charlista y escritor de la herencia taína y está muy activo en su comunidad
con la cultura latina y asuntos sociales. Adjunct Assistant Professor
Black Studies Portland State University P.O. Box 751, Portland, OR 97207-0751 United States of America Telephone: (503) 234-9525 (503) 725-4003 Archivo Histórico de Santiago Encargado, Dpto. Antropología y Arqueología #124 C, Restauración, Santiago, República Dominicana E-Mail: pferbel@yahoo.com Citaciones
Favor
de citar este artículo en la manera siguiente, incluyendo el número de
párrafos si es necesario:
Ferbel, P. J. (2002). KACIKE:
Revista de la historia y antropología de los indígenas del Caribe [Revista
electrónica], Edición Especial, Lynne Guitar, redactora. Disponible en:
http://www.kacike.org/FerbelEspanol.html [Fecha del acceso: 08, 07, 2004].
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©
2002. P. J. Ferbel, KACIKE.
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Pues me ha llamado la atencion la imagen que tienen de la comparsa, donde un "indigena" sostiene a una iguana. Pues yo soy biologa y trabajo con iguanas en el pais y la verdad que no he encontrado ninguna evidencia del uso que le daban los indigenas a las iguanas. No se si el autor de este blog tenga algun tipo de evidencia de este tipo. Nosotros asumimos que debia existir alguna interaccion entre indigenas e iguanas, solo que nada que nos los pruebe.
ResponderEliminarAdemas, si no es problema, me gustaria sugerir al blog hablar un poco sobre como estas practicas tainas, que fueron y son parte de nuestras tradiciones han impactado a las especies e incluso han puesta a varias especies en amenaza de extincion. Ej. La iguana Cornuta en la foto y la palma que usan para fermentar alcoholes es el Cacheo el cual esta en critico peligro de extinguirse.
Los tainos eran menos personas que nosotros y sus tradiciones no afectaban al mismo nivel. Creo que es algo super interesante ver como estas tradiciones heredadas empiricamente a traves del tiempo han influido al ambiente.
Buenos dias; Hola.
ResponderEliminarSi volví a encontrar una sonrisa, fue gracias a la Sra. Anne Eledge que recibí un préstamo de 45.000 euros, y dos de mis compañeros también recibieron préstamos de esta mujer sin ninguna dificultad. Es con la Sra. Anne Eledge, que mi vida vuelve a sonreír es una mujer de corazón sencillo y muy comprensiva. Aquí está su contacto:
Eledgefinance@gmail.com
Whatsapp: +33 7 51 94 54 09
Saludos sinceros