El Presidente del Partido Cívico Renovador general Jorge R. Zorrilla Ozuna dio inicio hoy viernes 25 de agosto en presencia de una parte importante del liderazgo del partido a una jornada de educación y formación política con una visión estratégica donde planteo que la educacion politica sera obligatoria para miembros y dirigente. A Continuación las palabras del Líder y conductor del PCR.
General Zorrilla Ozuna:
El Partido Cívico Renovador PCR es una agrupación política y social de carácter patriótica, constituida por hombres y mujeres dominicanos, con apego al ordenamiento constitucional, con capacidad de trazar nuestras propias directrices, con libertad de acción, libertad de pactos y alianzas con carácter de acciones consecuentes a las conveniencias históricas nacionales y con definición estratégica hacia la búsqueda de una transformación profunda de la sociedad dominicana donde impere la democracia verdadera, la que concebimos como una democracia participativa que le permita a los dominicanos vivir en igualdad en oportunidades sociales, políticas, económicas y educativas.
Alcanzar esa meta estratégica requiere muchos esfuerzos de todos y cada uno
de nosotros y los esfuerzos que se hacen
cada uno por un lado, sin que respondan a una disciplina que los reúna y los
mantenga unidos en una sola dirección, dice el profesor Juan Bosch, al
respecto: “podrán ser esfuerzos pero no se convertirán nunca en una
fuerza. La fuerza es el resultado de la
unión estrecha de todos los esfuerzos” y
la unión estrecha de todos los esfuerzos, en el caso del PCR debe nacer de la organización y formación política
de cada uno de sus miembros, militantes y dirigentes, organizados en los CR9 por lo que se hace
necesario la implementación de una
metodología organizativa y de capacitación política adaptable al PCR y a las
propias condiciones políticas, económicas y sociales de la realidad Dominicana.
El partido cívico renovador debe constituirse
en una nueva experiencia organizativa, social, política y cultural, superando
errores del pasado y haciendo aportes
para hacer de Republica Dominicana una gran nación donde sus hijos vivan
con dignidad tal como lo proclamaron Duarte, Luperón. Para nosotros, los hombres y las mujeres del
PCR, es necesario recordar unos versos del poeta Gaspar Núñez de Arces que decían: “Árbol que crece torcido
nunca su tronco endereza, pues se hace naturaleza el vicio con que ha crecido”. Una verdad que debemos tener presente a toda
hora.
¿Porque?
Porque
si algo tiene que crecer derecho, no torcido es el PCR, pues si no crece
derecho no podrá alcanzar jamás el fin que se ha propuesto, que es construir
una sociedad donde los dominicanos podamos vivir una democracia social
participativa con equidad y justicia.
La participación política debe entenderse como
una tarea de servicio público y representación de los diversos intereses y
aspiraciones de la sociedad.
El PCR
se propone la construcción de una nueva cultura política fundada en valores y espacios para el
debate de las ideas, la autogestión ciudadana y la solidaridad como alternativa a las formas de hacer política clientelar y
populista del liderazgo político tradicional.
El Buen
político es quien vive para la política en lugar simplemente de vivir de la
política. El buen político no aspira al cargo para ganarse el pan o disfrutar
sus privilegios sino para hacer realidad un ideal o un ideario. Esto implica
una ética de servicio público y de respeto por lo público: el buen político
siente y cumple el deber de servirles a sus conciudadanos, de ejecutar su cargo
de manera que ellos reciban el máximo beneficio; y el buen político no se enriquece
y no pone los bienes públicos o el poder público al servicio de sus intereses
personales o al de sus allegados.
El PCR está comprometido con la conquista y la defensa de los derechos
humanos y sociales fundamentales, incluyendo: los democráticos, civiles,
políticos, económicos, sociales, culturales, solidarios y religiosos, como son:
los de opinión, reunión y asociación, trabajo,
descanso, esparcimiento, retiro y jubilación justos, vivienda,
alimentación adecuada y agua potable, cobertura sanitaria y de salud amplias y
universales, educación, información, paz y justicia, desarrollo sustentable; es
decir, el derecho de todos los Dominicanos y Dominicanas, reconociendo las
diferencias de género, a vivir y a morir con dignidad en mundo de justicia social
fundamentado en marco de respeto de la
soberanía nacional.
LA FORMACIÓN POLÍTICA CON VISIÓN
ESTRATÉGICA
La formación política es la que nos clarifica
el panorama de las relaciones de poder en la sociedad. Gracias a ésta
formación, podemos identificar a los verdaderos factores de poder – los poderes
fácticos de la sociedad – y así poder desentrañar por que unos mandan y otros
obedecen, unos son incluidos y otros son excluidos, unos son ricos y poderosos
y la gran mayoría pobres y débiles, vulnerables al extremo.
No olvidamos la formación ciudadana que se
daba en las escuelas con el rótulo de educación cívica, pero los neoliberales
anularon todo eso en el sistema educativo. Hoy, desde El Partido Cívico
Renovador debemos rescatar el significado de la educación ciudadana. Ésta
educación debe desarrollar la cultura de respeto a los derechos humanos, pero
ésta cultura depende de la cultura política. Y toda cultura política depende de
una educación liberadora y de una convivencia basada en la tolerancia y en el
diálogo pluralista.
Esta visión nos permite comprender más a fondo
todo y tener una información veraz y objetiva de la sociedad en su conjunto que
es lo que aspiramos para cada amigo, simpatizante, miembro y dirigente del PCR.
La formación política nos permite desarrollar
nuestra capacidad de observación, nuestra actitud crítica y nuestra capacidad
de respuesta ante los acontecimientos que a diario se dan en las esferas
económicas, políticas y sociales.
El conocimiento y ejercicio de los derechos y
deberes del ciudadano, el conocimiento y observancia de las disposiciones de la
Constitución de la República y de las leyes en general, la comprensión de la
razón de ser de la sociedad y el papel del Estado, del gobierno central y de
los municipios, como la ubicación correcta de las organizaciones políticas,
sindicales y sociales – culturales en general, es parte substancial de la
formación política.
La formación política nos permite analizar,
comprender y buscar superar los conflictos sociales que se reproducen y agravan
en forma sistemática, ya que vivimos en sociedades profundamente conflictivas,
muchas veces disfrazadas maquiavélicamente de sociedades democráticas. La
formación política nos proporciona herramientas claves para avanzar en nuestro
nivel de conciencia crítica y política, y poder así organizarnos coherentemente
y tener la capacidad de lucha para transformar la realidad actual. Pero la
formación política se completa cuando se desarrolla en la vida y en el quehacer
de los dirigentes una VISIÓN
ESTRATÉGICA.
Esta VISIÓN ESTRATÉGICA significa que
adquirimos una capacidad de construir un poder propio, ya que quienes carecen
de poder propio, viven a la sombra de un poder ajeno.
Construir un poder propio es organizar el
espacio donde se debe actuar, es administrar el tiempo y prepararse para conducir los procesos
encaminados a la transformación de la realidad. Por eso la visión estratégica
comprende además el aprendizaje permanente para la delicada y decisiva tarea de
aglutinar y organizar fuerzas y sectores de clases para confrontar y negociar.
Toda lucha política y social se nutre de la dialéctica de confrontación y
negociación.
EN LOS LINEAMIENTOS DE LA ESTRUCTURA ORGANIZATIVA ASPIRAMOS
En este momento lo más importante para el PCR
es que construyamos un partido que actúe en todo el país. Para lograr esta meta tenemos que organizar
en cada paraje, sección, en cada pueblo, en cada ciudad o barrio del país en
Comités Renovadores CR9, a los hombres y mujeres con sensibilidad política,
sentimientos patrióticos y vocación social y todos aquellos que han manifestado
simpatizar con la propuesta renovadora
del PCR.
¿Para qué y cómo debemos organizarnos en el
PCR?
Debemos
organizarnos para varias cosas, según sean las etapas que debemos recorrer para
llegar a nuestra meta.
Debemos
organizarnos para:
a) El crecimiento y desarrollo del PCR
b) asegurar la existencia de un partido
fuerte
c) un partido bien organizado,
disciplinado y Consciente.
d)
Un Partido donde sus dirigentes, militantes
y miembros adquieran la necesaria formación política para que el PCR
pueda cumplir sus planes estratégicos y metas políticas.
Para cumplir esas condiciones a las que
acabamos de referirnos se necesita, que él método de trabajo del Partido sea a
la vez colectivo o de grupo, esto es, combinado, discutido, aprobado y llevado
a cabo por organismos del Partido, no por una sola persona. Esas palabras quieren
decir que la idea de hacer una cosa cualquiera no debe salir de la cabeza de un
miembro del Partido para convertirse inmediatamente en hecho o en realidad,
sino que debe salir de la cabeza de un hermano renovador y pasar a ser
discutida por organismos del Partido, es
decir, buscar el consenso.
En lo organizativo aspiramos para el PCR un
modelo de organización dual, por un lado
Territorial o espacial y por el
electoral tomando como referencia el marco estructural de la Junta
Central Electoral tal como está planteado en los estatutos del partido.
Es
decir, procuramos que el partido implemente una línea organizativa inteligente, buenas intenciones, trasparencia
y desprendimiento. Un órgano articulado, comunicado e informado vía, por una
parte, la organización espacial o territorial (CR9, Bloques, Direcciones
Municipales, Distrital y Frentes de Masas) y por la otra los Comités Afectivos
Electorales CAE (Comité Barriales/Comunales), Colegios, Recintos y
Circunscripciones electorales basado en acuerdos y consensos, el respeto, la firmeza y la seguridad, el
trabajo voluntario y la responsabilidad, donde la coherencia en el pensar,
actuar y hablar contribuya a la creación de un
nuevo concepto en el PCR de militante comprometido.
Para el logro del éxito de la estrategia
organizativa y electoral proponemos:
·
Alcanzar o
proponerse objetivos sencillos, coherentes, es decir, ir de lo simple a lo
complejo. La coherencia de los objetivos no es más que las posibilidades reales
del partido para conseguirlo.
·
Cada dirigente y
miembro buscara nueve personas para
formar su CR9 (los CR9 que ya existen asignarles tareas en el trabajo
comunitario y en la formación de los Comités Afectivos Electorales CAE)
·
Dividir el
espacio territorial, tanto el municipio
como el distrito municipal en cuatro cuadrantes simulando un eje cartesiano; en esos
cuadrantes irán localizándose los
bloques y sus respectivos CR9 en función de su jurisdicción espacial o
territorial.
·
Cada jurisdicción
de un bloque le corresponderá un determinado número de recintos electorales.
·
Los bloques
tendrán una instancia superior inmediata que es la dirección municipal o distrital.
METAS ORGANIZATIVAS Y
ELECTORALES
Para alcanzarlas, entendemos la necesidad de disponer de los recursos humanos, logísticos,
financieros, políticos y programáticos
que permitan construir y coordinar en primer lugar una fuerza de base de
más de 16.000 líderes debidamente
identificados, registrados, carnetizados, documentados, capacitados,
empoderados, vinculados, referenciados y comprometidos a fin de interactuar en
los espacios de apropiación, participación y defensa de la administración de
los intereses políticos del PCR. Tomando como guía aglutinador los alrededor de
más 16000 Colegios
electorales que hay en el país.
2. Acoger
a los líderes identificados, comprometidos y probados conceptual e
ideológicamente, que puedan actuar
y participar activamente en los espacios de construcción de la agenda
política del PCR, encargada de lograr la mayor participación en las próximas elecciones.
3. Vincular
a hombres, mujeres, jóvenes, niños, adultos mayores, con capacidad de aportar y
recibir conocimiento, para que en forma soberana, libertaria y dispuesta
construyan los espacios que traduzcan
al PCR en una portentosa maquinaria política.
4. Promover
y formar candidatos locales idóneos que
representen a la organización, en los espacios de garantías humanas, aplicación
de principios éticos y temáticos electorales.
DE LOS CR9 A LOS COMITÉS
AFECTIVOS ELECTORALES.
Un Comité Afectivo Electoral es una unidad
orgánica formada por miembros CR9, de simpatizantes, amigos del PCR organizados en torno a su colegio
electoral o el propio recinto electoral.
Para darle una mayor, coherente y eficiente
coordinación al plan de traba la Presidencia del PCR está tomando la iniciativa
de crear la Comisión Conjunta de
adiestramiento, supervisión y seguimiento de los programas de trabajo de las
Secretarias de Organización, Electoral, educación y tecnología.
Cumplirá
funciones de:
1.
Coordinación,
2.
asesoría,
3.
orientación,
4.
comunicación,
5.
supervisión
Tendrá por
misión garantizar el desarrollo
homogéneo y armónico de la estructura organizativa y electoral del PCR
garantizando que se cumplan los métodos de trabajo y las reglamentaciones del
partido en materia organizativa, electoral, educativa y tecnología con el
propósito de alcanzar las metas y objetivos propuestos. Por igual tiene por compromiso revisar
periódicamente el cumplimiento de las metas establecidas en los planes de trabajo,
así como el cumplimiento de los acuerdos hechos fuera de dichos planes y los
mandatos de los organismos superiores. Debe informar el cumplimiento o no de
las tareas delegadas a la Presidencia del Partido.
LA ESTRUCTURA ORGANICA DEL PCR
La estructura orgánica del PCR debe partir de
los CR9, que es la unidad básica del Partido; es decir, ir de lo particular a
lo General, y lo particular aquí es el CR9 y lo general es la unidad orgánica
superior inmediata, que es el bloque.
En la primera fase de organización, el Partido
ha asumido como línea organizativa, que los municipios estructuralmente estén
divididos por cuatro bloques, tomando como marco de referencia un eje
cartesiano imaginario. Cada uno de estos bloques disponen de una estructura dirigencial
de 12 personas. En su punto de partida, cada uno de estos doce dirigentes por
bloques tiene el mandato de formar un CR9. Los Bloques en su es espacio
territorial conjuntamente con la Secretaria
Electoral y de organización deben organizar estructuras por recintos
electorales incluidos en la demarcación de
los distintos Bloques en el cuadrante municipal.
Siguiendo la línea o el principio de lo
particular a lo general, luego que los dirigentes de los bloques por municipios
hayan formado cada uno su CR9, los bloques pasan hacer lo particular y lo
general la unidad orgánica superior inmediata que es el municipio. El municipio
contara con una estructura dirigencial compuesta por el presidente y el
secretario de cada uno de los cuatro
bloques que forman el municipio, el encargado electoral municipal y el resto de los dirigentes municipales, la
comisión política completara la dirección
escogiendo a meritorios miembros del partido en base al trabajo y al
cumplimiento de las tareas asignadas.
En la línea organizativa, se ha tomado en
consideración, que en aquellos distritos municipales, donde haya un liderazgo
del partido con las condiciones suficientes para formar un bloque, están
autorizados a formarlo siguiendo la
misma línea metodológica y principios
establecidos en la constitución de bloques, con la misma estructura dirigencial
y el mandato de cada dirigente formar su
CR9. En el caso del bloque del distrito
municipal, su presidente pasa a formar parte de la estructura dirigencial
municipal.
El país cuenta actualmente con 48
circunscripciones, donde el gran Santo Domingo tiene nueves circunscripciones,
asumiremos estas nueves circunscripciones con la categoría de municipios desde
el punto de vista organizativo y electoral. (El caso concreto de Santiago, se
determinara en la medida avancen los trabajos organizativos)
LA ACTUAL NECESIDAD DEL PCR
La necesidad del PCR es obvia: ganar espacio y
posicionamiento político, objetivo que
pasa por una estrategia organizativa y electoralista. Hay que combinar la
estrategia organizativa con la electoral. Llegará un punto en el que, para
avanzar será preciso algo más que una representación parlamentaria y un partido
electoralista. Será preciso una
organización capaz de encuadrar y organizar amplias masas populares, capaz de
garantizar la autodefensa de las grandes mayorías sin oportunidades y excluidas
de los beneficios que generan los
procesos socios productivos y la acumulación que genera el desarrollo de las
fuerzas productivas (Estructura-CR9) y
esto mucho más, cuando en la actualidad, los partidos tradicionales ya no
escuchan lo que quiere y dice la gente. Así pues, el modelo organizativo debe prever
las necesidades actuales (electoralistas), pero también el previsible deterioro
de la situación de los grandes partidos.
El PCR, con esta metodología organizativa, se
propone alcanzar para las próximas
elecciones del 2020 una estructura electoral con capacidad de organización y
movilización; claro, sin perder de vista que una organización revolucionaria,
renovadora como es el caso del PCR, antes de convertirse en una organización de
masas, debe iniciar por una organización de vanguardia
(estructura-CR9) formada por personas con ideas políticamente avanzadas y
renovadoras. De ahí la necesidad de
formar a nuestros miembros, militantes y dirigentes en conocimientos, ideas y
métodos apropiados para vincularnos con las masas para ganarla a las ideas
renovadoras y convertir al PCR –de hecho- en vanguardia política de las
fuerzas de avanzada de la sociedad dominicana.
Dadas las condiciones propias de la República
Dominicana y en el entendido que las elecciones presidenciales, legislativas y
municipales del 2020 están a ley de dos años y unos meses y para tal evento
electoral, el PCR se ha trazado unas metas
y unos objetivos que lo obligan poner en práctica una metodología organizativa
en dos cursos de acción: organizar una estructura espacial o territorial (CR9)
y una estructura electoral por Colegio de votación (Comités Afectivos
Electoral), en el buen sentido de un politólogo diría, que estamos construyendo
en el PCR un partido de cuadros y un partido de masas al mismo tiempo, lo que
indefectiblemente convierte al PCR en un Partido Emergente con estrategia de
crecimiento y proyección de futuro. En
otra palabra, quiere decir que “Que todo el esfuerzo político del Partido vaya
dirigido a crear las bases para ser una fundamental fuerza de masas, con
política de masas, desde una sólida organización de cuadros”.
Los
Comités Renovadores CR9 son las raíces del
Partido; todos juntos forman la zapata en que se apoyan las paredes del
Partido. Son la base de nuestra organización. No se puede ser miembro y
dirigente del partido si no se ha sido miembro de un CR9, salvo los casos de
personas que en los primeros tiempos del Partido se ganaron la categoría de
miembros porque le presentaron al PCR servicios importantes.
El nuevo miembro de un CR9 automáticamente tiene la obligación de formar
un Comité Afectivo Electoral con amigos y simpatizantes del PCR que conozca o
conquiste para el PCR.
Los miembros de los CR9 son líderes de primer
nivel, pues, escogen en el seno del pueblo a los simpatizantes del Partido que
a su juicio tienen condiciones para pasar a ser aspirantes a miembros de los
futuros nuevos CR9; es decir, los que van a formar o ser parte de los
Comités Afectivos Electorales CAE. Y como conjunto de líderes, los
miembros de un CR9 están en la obligación de ir desarrollando sus capacidades
de líder realizando trabajos de dirección con el criterio de que el que enseña
aprende, palabras que en su caso significan que dirigiendo y vigilando la
formación y el desarrollo de CR9 ellos mismos irán desarrollándose como
líderes, porque irán día a día aprendiendo el arte de organizar y dirigir
hombres y mujeres.
Comité Renovador (CR-9)
Un Comité Renovador (CR-9) es un organismo
formado por hombres y mujeres que desean
adquirir una formación política teórica
y práctica con el trabajo social y político en su espacio territorial.
También, los miembros de un Comité Renovador (CR9) tendrán por tarea, en
coordinación con los dirigentes del PCR en la circunscripción, municipio,
bloque o distrito municipal
correspondiente, formar Comités Afectivos Electorales tomando como guía
la estructura organizacional de la JCE: Recintos, Colegios electorales (mesas)
y circunscripciones.
Todos los hombres, mujeres, jóvenes,
estudiantes, discapacitados, tanto de la zonas rurales como de la urbana que
entran en el Partido por la puerta de los Comités Renovadores (CR9) comienzan
su tarea aprendiendo a ver desde un punto de vista científico como ha ido
produciéndose la historia de nuestro pueblo, pues si la finalidad estratégica
del PCR es alcanzar una sociedad con justicia social y vivir en dignidad, lo
primero que tienen que conocer a fondo y seriamente los hombres y mujeres
renovadores es como se ha producido su
historia, que fuerzas lo han formado.
Si el Partido no arranca de los CR9 y al mismo tiempo reciben formación
política mínima, echará sus raíces en el
amiguismo, esto es, en un grupo de amigos del dirigente o de los dirigentes del
lugar donde se forme y del amiguismo se pasa con mucha facilidad al grupismo,
especialmente en los sitios donde los fundadores del Partido sean dos o tres
personas de origen pequeño burgués que comienzan a organizarse en el partido
siendo amigos y después se separan por celos que casi siempre se relacionan con
la ambientación de mando dentro del Partido y al separarse ellos los miembros
del Partido se separan en grupos que los siguen.
Mayor
General Jorge R. Zorrilla Ozuna
Presidente
Partido Cívico Renovador