MORAL Y LUCES

MORAL Y LUCES

viernes, 14 de octubre de 2016

Sexo, mentiras y cero debate entre Hillary y Trump





Hillary Clinton y Donald Trump sostuvieron su segundo debate –más bien combate– presidencial en medio de la peor crisis de la campaña del republicano. El enfoque no estuvo tanto en la economía, las guerras, la lucha antiterrorista o el cambio climático, sino en el sexo, las mentiras, las videograbaciones y los correos electrónicos.


A un mes de la elección general del 8 de noviembre, y ante un éxodo sin precedente de políticos republicanos de la campaña de su candidato, que incluyen llamados a que se retire de la contienda, como resultado de declaraciones grabadas hace una década que revelan su agresión sexual contra mujeres, Trump necesitaba rescatar su campaña mientras Clinton buscaba hundirlo lo más posible.

El resultado fue un combate inusualmente personal en lo que suelen ser foros civiles –ni la mano se dieron al inicio– donde se evita cuestionar la calidad moral de cada contendiente. Esta noche Trump amenazó con encarcelar a Clinton si llega a la presidencia, mientras ella dijo que él estaba descalificado para ocupar la presidencia por sus comentarios no sólo contra mujeres, sino contra mexicanos, musulmanes y discapacitados, entre otros.

El debate que se realizó en San Luis tuvo un formato diferente llamadotown hall, como asamblea del pueblo, en el que los candidatos respondieron preguntas de votantes indecisos que estaban alrededor del escenario y no sólo de los dos moderadores, Martha Raddatz, de ABC, y Anderson Cooper, de CNN.

El asunto de los comentarios de agresión sexual de Trump que han descarrilado su campaña desde el viernes pasado se abordó al inicio. Raddatz señaló que ese tema ha sido el más consultado en Internet de toda la contienda electoral a lo largo de los últimos 12 meses.

Trump reiteró su defensa de que fueron comentarios de vestidor y agregó: “no estoy orgulloso de ello… estoy avergonzado. Lo odio”, sólo para de inmediato tratar de desviar la atención hacia otro tema, afirmando que acabaré con el Isis. A la vez, acusó que nadie en la historia de la política ha sido más abusivo de mujeres que Bill Clinton. De hecho, como prólogo al debate, Trump sorprendió a todos esta noche al transmitir una breve conferencia de prensa unos 90 minutos antes del gran evento, en la que se rodeó de cuatro mujeres que han acusado anteriormente a Bill Clinton y su esposa de maltrato, incluyendo hostigamiento o agresiones sexuales. Las acciones hablan más fuerte que palabras. El señor Trump podría haber dicho algunas malas palabras, pero Bill Clinton me violó y Hillary Clinton me amenazó, afirmó Juanita Broaddrick, una de las mujeres. Todas después asistieron al debate, donde el ex presidente y su hija estaban entre el público.

Cooper insistió sobre si de verdad había cometido los actos sobre los que hablaba en la videograbación, ya que eso era agresión sexual, pero Trump sólo repitió su defensa de vestidor y continuó desviándose hacia otros temas. Pero subrayó: “yo tengo gran respeto por las mujeres… y las mujeres tienen gran respeto por mí”.

Por su parte, Clinton dijo: “lo que todos vimos y oímos el viernes fue a Donald hablando de mujeres, lo que piensa de las mujeres, lo que les hace a las mujeres… representa justo quién es”. Acusó que ha insultado a mujeres, hizo comentarios denigrantes contra una ex Miss Universo y ha hablado de manera abusiva contra inmigrantes, afroestadunidenses, latinos y otros; eso no es lo que somos. Indicó que con otros candidatos ha tenido diferencias, pero “nunca he cuestionado si alguien es apto para ser presidente… él no está calificado para ser presidente”. Afirmó que como país tenemos grandeza porque somos buenos.

Aunque sí abordaron algunos temas de política –comercio, energía, inmigración, Siria, Rusia y refugiados–, en los cuales los candidatos reiteraron sus posiciones de siempre, lo que marcó la noche fueron los inusitados ataques personales durante más de hora y media de combate verbal.

Esto incluyó tal vez algo sin precedente en tiempos modernos: la amenaza de una persecución legal. En torno al tema del manejo de los correos electrónicos de Clinton cuando era secretaria de Estado, y repitiendo la acusación de que ella destruyó 33 mil de ellos, Trump asombró al afirmar que no pensaba decir esto, pero lo voy a decir, y odio decirlo, pero si gano, voy a dar instrucciones a mi procurador general de poner un fiscal especial para indagar tu situación.

Clinton reviró: qué bien que alguien con el temperamento de Donald Trump no esté a cargo de nuestra ley en nuestro país. Trump replicó: Porque tú estarías en la carcel.

Ambos intercambiaron acusaciones y repitieron que el otro debe estar avergonzado de sí mismo por varios engaños y maniobras. En una, Trump recordó que Bernie Sanders había dicho que Clinton tenía mal juicio, y añadió que no entendía por qué el ex contrincante se había sumado al bando del diablo, o sea, Clinton. Más tarde afirmó: ella tiene tremendo odio en su corazón.

Un momento que llamó la atención fue cuando una musulmana estadunidense preguntó qué haría cada candidato ante la islamofobia que se ha generado en el país. Trump dijo que primero había que llamar las cosas como son, que hay una amenaza proveniente de terroristas radicales islamitas, y que era responsabilidad de la comunidad musulmana en este país reportar el odio que está ocurriendo.

Clinton respondió que la retórica demagógica de Trump sobre musulmanes no ha sido útil, ya que ha dividido comunidades, y que sus declaraciones son una herramienta de reclutamiento para las fuerzas del Isis.

En cuanto a su posición contra el ingreso de refugiados, Trumpo advirtió que eso era un caballo de Troya de todos los tiempos.

Ambos repitieron sus posiciones sobre Rusia; Clinton afirmó que los rusos han sido acusados de buscar influir en las elecciones estadunidenses y que “Wikileaks es parte de eso” –en su contra a través de los “hackeos recientes”–, mientras Trump lo puso en duda. Ella dijo que estaba dispuesta a confrontar a Vladimir Putin, insinuando que Trump era su aliado. Él reviró que cada vez que algo malo ocurre, ella acusa a Rusia.

Sobre si ha pagado impuestos federales, tema con el que fue golpeado hace una semana, cuando el New York Times obtuvo documentos que indican que era posible que hubiera evitado hacerlo durante casi 20 años empleando subterfugios legales, Trump sorprendió al confirmar que sí empleó la ley para beneficiarse, pero no ofreció mayores detalles.

La última pregunta era sobre si cada uno tenía algo bueno que decir del otro, o algo que respetaban. Clinton dijo: sus hijos. Él dijo que admiraba que ella nunca se rinde. Se dieron fríamente la mano y sus jefes de campaña de inmediato declararon que su candidato/a había triunfado.
__________
TOMADO DE LA La Jornada


Más leídos

martes, 11 de octubre de 2016

EEUU: final de su omnipotencia


Lenguaje inteligible


Por una vez el lenguaje diplomático se hace inteligible. Y lo hace en tanto en cuanto que deja de ser diplomático. Quien lo ha hecho ha sido el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov. Siempre pausado, siempre cauto, suave en las formas y duro en el fondo Lavrov ha demostrado que está hasta la coronilla de los EEUU y sus vasallos. No es él, es Rusia entera.

Lavrov lo ha podido decir de mil maneras y endulzar de cien formas diferentes el mensaje, pero ha decidido que no, que ya basta y que todo el mundo tiene que saber lo que está pasando. Y lo que está pasando es que "EEUU está empezando a tomar conciencia del paulatino, pero aún así inevitable, final de su omnipotencia" (sic) y eso explica no sólo su animadversión hacia Rusia, sino sus conductas erráticas.

Este  reconocimiento de la progresiva pérdida de influencia no es único de EEUU, sino de sus vasallos occidentales. Lavrov nuevamente; "este proceso está siendo muy doloroso para los países occidentales ya que, durante siglos, eran quienes controlaban el mundo" (sic). Y sigue: "así ha sido desde los siglos XVI-XVII; establecían normas y reglamentos y todo el mundo escuchaba. Incluso en 1992 [desaparecida la URSS] pensaron que se habían metido a Rusia en el bolsillo. Hasta hace un par de años nos decían que Rusia debe conformarse con ocupar su lugar, de forma peyorativa, que sólo éramos una potencia regional. Ahora incluso nos acusan de interferir en la carrera presidencial de EEUU".

Fue en una entrevista en televisión el pasado día 7, en hora punta. Lavrov dijo muchas cosas más (es una lástima que sólo esté la transcripción en ruso porque es muy jugosa) tanto con referencia al nuevo papel de Rusia en la geopolítica como en la cuestión siria. Aquí fue también demoledor al afirmar que "al igual que la Adminsitración de Ronald Reagan creó Al-Qaeda y la de George Bush el [llamado] Estado Islámico, no me gustaría que la Administración Obama pasase a la historia como quien ha favorecido, fortalecido y asegurado el éxito de una nueva estructura terrorista como la del Frente al-Nusra (ahora redenominado Frente para la Conquista del Levante, la rama de Al-Qaeda en Siria)" (sic). No es un ciudadano normal quien hace estas afirmaciones, es el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia.

Ya que estamos en Siria, dos apuntes: supongo que sabréis que el viernes se votaron en el Consejo de Seguridad de la ONU dos resoluciones sobre un mismo asunto, el sirio. La primera, patrocinada por Francia y España, pedía el fin de los ataques a Alepo, el fin de los vuelos de los aviones y el fin de todo. Rusia la vetó y China se abstuvo (tomad nota porque, como ya os dije, China está abogando de forma clara por reforzar sus vínculos con Francia y Alemania y ya está cortejando de forma clara a los sustitutos de los mandatarios actuales, Hollande y Merkel). La segunda, patrocinada por Rusia con el aval de China, planteaba que si se quiere seguir cumpliendo las resoluciones anteriormente aprobadas había que continuar combatiendo "a todos los grupos, entidades o individuos asociados o vinculados con Al-Qaeda", además de apoyar el plan del enviado de la ONU para Siria sobre la retirada de los miembros de la "contra" de Alepo. Fue vetada por EEUU, Francia y Gran Bretaña. Es la primera vez en la historia de la ONU que ocurre un veto doble el mismo día y sobre el mismo tema.

Aquí el representante de Rusia hizo lo mismo que su ministro: habló con claridad y sin tapujos diplomáticos. Se llama Vitaly Churkin y respondió a Gran Bretaña. "el representante permanente del Reino Unido acaba de exclamar patéticamente "¡Paren esto ahora!”. Tiene razón, paren ustedes inmediatamente de respaldar a la escoria de todo tipo en el mundo entero, ya sean extremistas, terroristas y a todos aquellos que se dedican a desestabilizar la situación en tal o más cuál país. De manera general, cesen ustedes de inmiscuirse en los asuntos de los demás Estados soberanos. Renuncien ustedes a sus costumbres coloniales. Dejen tranquilo al mundo. Eso permitirá sanear la situación en varias regiones del mundo”.

Las posiciones cada vez están más claras, el discurso también. Por si fuera poco, el representante chino Liu Jieyi, explicó su postura de la siguiente forma: "el proyecto francés no refleja el respeto pleno de la soberanía, la independencia, la unificación y la integridad territorial de Siria mientras que el contenido del proyecto de Rusia sí lo hacía y lamentamos que no se adoptase el proyecto ruso de resolución".

Y un dato a tener en cuenta: Egipto, único país árabe en el Consejo de Seguridad, votó a favor de la resolución rusa. Esto puede tener varias explicaciones (una, por ejemplo, el malestar con Arabia Saudita porque no han llegado los miles de millones de dólares prometidos tras aplastar a los Hermanos Musulmanes) en las que no voy a entrar ahora.




Todo esto se produce la misma semana en la que el enfrentamiento entre EEUU y Rusia ha dado un salto espectacular pero que hay que interpretar como actos a la desesperada por parte de EEUU, que se siente, como dicen los mexicanos, "ninguneado" cada vez más y por más gente. Un ex diplomático indio (de la India) lo acaba de decir de forma muy gráfica tras comentar la entrevista a Lavrov:"comparados con él, sus colegas de EEUU no le llegan ni a la cintura; si comparas los comentarios de Lavrov con los de Kerry [el secretario de Estado de EEUU], los de éste suenan a los de un hombre frustrado, que ha perdido la calma" (sic). Y sigue: "EEUU no se da cuenta que la tierra ha comenzado a hundirse bajo sus pies en Oriente Medio; sus antiguos aliados Turquía y Arabia Saudita ya están tocando por su cuenta porque la orquesta ya no tiene director". Y termina: "la visión de un imperio que se hunde no es gratificante [para ese imperio]: fue el caso de Roma, de Bizancio, de España, de Portugal, de Francia, de Gran Bretaña...". ES M.K Bhadrakumar, un ex diplomático durante 29 años que sabe de lo que habla.

Por eso las bravatas de EEUU sobre ataques a Siria, por eso sus bravatas sobre la guerra nuclear; y no tan bravatas puesto ayer se conoció que no hace mucho tiempo realizó dos simulacros de lanzamiento de bombas atómicas en una de sus bases militares en Nevada. Lo más alucinante es la justificación; "obtener datos sobre la fiabilidad, precisión y datos de rendimiento" de las bombas. Con eso está todo dicho.

La situación está llegando a un nivel sin precedentes, por lo que el hecho de que unos diplomáticos hayan utilizado un lenguaje inteligible tiene mucho mayor mérito: todo el mundo lo entiende y puede comprender hacia dónde se decanta el mundo y quiénes son sus verdugos.


El Lince

domingo, 9 de octubre de 2016

Fidel : El destino incierto de la especie humana

sábado, 8 de octubre de 2016

El Che Guevara en entrevista 1964 habla de EEUU y Cuba

Che Guevara: Sobre la base de los principios, la normalización de las relaciones con EEUU sería ideal para nosotros (+ Fotos y Audio)



El Che Guevara y Lisa Howard llegan al teatro Little Carnegie para una proyección especial dedicada a John F. Kennedy, asesinado un año antes. Al centro es el intérprete para el Che. 16 de diciembre de 1964. Foto: William N. Jacobellis / New York Post
El Che Guevara y Lisa Howard llegan al teatro Little Carnegie para una proyección especial dedicada a John F. Kennedy, asesinado un año antes. Al centro es el intérprete para el Che. 16 de diciembre de 1964. Foto: William N. Jacobellis / New York Post
Cubadebate comparte con sus lectores otra entrevista poco conocida que concedió en 1964 Ernesto Che Guevara, entonces Ministro de Industrias de la Revolución, a la periodista Lisa Howard.  Ella tendría un papel activo en las conversaciones secretas entre el Comandante en Jefe Fidel Castro y altos funcionarios de la administración estadounidense, de acuerdo con revelaciones de investigadores cubanos y de EEUU (al final usted podrá leer documentos desclasificados por el gobierno de los Estados Unidos sobre este particular).
En el diálogo con la estadounidense, el Che devela su pensamiento económico, su rechazo al bloqueo los Estados Unidos, su admiración y fidelidad hacia el líder de la Revolución. Hemos rescatado, además, las imágenes tomadas por el fotógrafo Elliott Erwitt, que acompañó a la periodista, y el audio de la conversación. Un material de sumo valor histórico que nos hizo llegar el investigador Elier Ramírez.
Es nuestro homenaje al guerrillero asesinado un día como hoy, hace 49 años.

La entrevista

El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
Che Guevara en ABC, 22 de marzo de 1964: ISSUES AND ANSWERS
Esta es la primera entrevista exclusiva con el Comandante Ernesto “Che” Guevara, ministro de Industrias de Cuba, que se ve y se oye en los Estados Unidos. Convencida de que un perfil del hombre a quien se ha llamado “el poder detrás de Castro”, “el arquitecto de la Revolución cubana”, “el mayor izquierdista de Cuba”, y el posible sucesor de Castro, sería de interés para el pueblo norteamericano, ABC envió sus cámaras y a Lisa Howard a Cuba para realizarle esta entrevista filmada al Comandante Guevara en sus oficinas del Ministerio de Industrias en La Habana.
Lisa Howard: ¿Cuánto afecta el bloqueo económico la economía cubana?
Comandante Guevara: No puedo darle una cifra exacta del efecto del bloqueo en Cuba, y, créalo o no, el bloqueo tiene efectos buenos y malos. Entre los buenos está el desarrollo de la conciencia nacional y el espíritu de lucha del pueblo cubano para superarlo […] que toda nuestra maquinaria era estadounidense, y que también nos vendían su maquinaria de segunda mano, y con ganancia, y muchas de esas líneas de abastecimiento se han descontinuado ahora, así que puede imaginarse lo que ha implicado para nosotros este bloqueo y el esfuerzo que se necesita para contrarrestarlo. No puedo darle cifras. No las conozco. Pero obviamente ha sido un serio obstáculo. Pero a la vez, ha sido una útil lección para nosotros. Nos ha enseñado cómo manejar nuestra economía en el futuro. Creo que eso más o menos responde su pregunta. 
LH: Rusia está inyectándole una gran cantidad de dinero a la economía cubana cada día. ¿Qué le sucedería a la economía de la isla si esa ayuda cesara de repente? 
CG: Esas afirmaciones sobre sumas diarias me parecen típicas de la manera de pensar de los norteamericanos y del concepto que tienen sobre las inversiones. Puede que de cierto modo reflejen la idea de lo que entienden los norteamericanos por “ayuda”. La ayuda de los Estados Unidos a los países de la América del Sur al final se revierte contra el Estado que la recibe. En nuestro caso ha habido algo que podría llamarse ayuda, como la condonación de ciertas deudas comerciales, créditos a largo plazo, pero sobre una base puramente comercial. En cuanto al resto, se trata del comercio normal, natural, entre dos países. Los Estados Unidos ya no son el principal socio exportador-importador de Cuba. Es la Unión Soviética.
Pero si con su pregunta sobre qué pasaría si cesara la ayuda soviética se refiere al conjunto de nuestros intercambios, puedo responderte que la vida del país se paralizaría, porque… por ejemplo, el petróleo, todo nuestro petróleo, casi cuatro millones de toneladas, viene de la Unión Soviética, pero no se trata de ayuda, sino de un intercambio comercial sobre la base de una absoluta igualdad, y nosotros pagamos con azúcar y otros productos. 
LH: ¿Podría hacernos una evaluación de cuán efectivo ha sido el bloqueo de los Estados Unidos?
CG: Creo que casi me está invitando a filtrarle información confidencial. Hemos reconocido la importancia del bloqueo, pero también hemos afirmado, con la misma tranquilidad, que el bloqueo no nos impediría avanzar. Pero primero que todo, resulta difícil ser específico sobre él, y además, no es muy apropiado. Después de todo, a pesar de sus buenas intenciones, seguimos siendo enemigos. Y el enemigo en realidad solo debe conocer generalidades de la otra parte. 
LH: Recientemente Cuba compró ómnibus en Londres. Está negociando para la compra de barcos en España. Tengo entendido que hay una misión económica en Suiza. ¿Eso representa un cambio fundamental en la economía cubana?
CG: No lo creo. Creo que se ha producido un cambio en la política económica de algunos países. Se ha producido una cierta ruptura de la llamada unidad monolítica del mundo libre. Hay más comercio con Cuba ahora. Nuestro comercio siempre ha tenido la misma base. En otras palabras, mercancía es mercancía, y debe haber [un beneficio mutuo] para el vendedor y el comprador. Sobre esa base hemos comerciado con todo el mundo, incluidos los Estados Unidos, aun después de la ruptura de las relaciones.
Los Estados Unidos han ejercido grandes presiones para impedir que se nos vendan ciertos productos, y usted conoce muy bien el debate que se produjo y las discusiones que tuvieron lugar porque Leyland nos vendió los ómnibus. Pero en realidad no somos nosotros quienes hemos cambiado. Ciertos aspectos de la política internacional han cambiado. No sé si tenemos algo que ver con eso. No lo creo. No creo que seamos tan importantes. 
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
LH: ¿Opina que esas compras representan un fracaso del bloqueo de los Estados Unidos?
CG: Sí. 
LH: ¿Un fracaso serio?
CG: Eso depende de cómo afecte al ego norteamericano, de los Estados Unidos. 
LH: Comandante Guevara, ¿cree usted que este comercio con Occidente continuará y quizás se ampliará en un futuro próximo?
CG: Eso espero. Naturalmente, no depende solo de nuestros deseos, sino también de los deseos de las personas con quienes comerciamos hoy. Pero tengo esperanzas de que continúe y de que entremos en una nueva era en lo relativo a las relaciones con Cuba. Que los países europeos se hayan dado cuenta de la importancia de sostener relaciones con todos los países del mundo y de que Cuba es un buen mercado, un mercado confiable, estable, en resumen, un mercado permanente.
Así que todo nos lleva a confiar en que estas relaciones continuarán y se ampliarán en el futuro. Estamos extremadamente interesados en eso. Ya hemos firmado acuerdos para la compra de fábricas completas con ciertos países: con Francia, con Inglaterra, con Japón. Creemos que en el futuro podremos proseguir este tipo de transacciones con mayor seguridad, porque en el pasado siempre existía el temor de que si se interrumpían las relaciones comerciales cómo íbamos a obtener piezas de repuesto, pero en especial Inglaterra y Francia han mantenido muy buenas relaciones con nosotros a ese respecto. Han garantizado el suministro de piezas de repuesto para los equipos que les hemos comprado durante la etapa revolucionaria.
Esto también ha robustecido nuestra confianza en la posibilidad de importar nueva maquinaria, y entonces, con técnica de primera clase, de los últimos modelos, equipar toda una serie de industrias que ahora nos encontramos desarrollando. 
LH: ¿Qué le ocurriría a la economía cubana si este comercio con Occidente se interrumpiera de repente?
CG: Nada.
LH: Ahora haremos una breve pausa y regresaremos en un momento con más ISSUES AND ANSWERS.
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
LH: Comandante Guevara, muchas evidencias externas indican que el sistema económico marxista no funciona. No le proporciona una vida de abundancia a su gente. Al cabo de 47 años, la Unión Soviética todavía no es capaz de brindarle alimentos, viviendas y ropa apropiados a su pueblo. ¿Cree que es posible que el sistema marxista no brinde incentivos adecuados para alcanzar altos niveles de productividad?
CG: Usted tiene una tendencia a hacer declaraciones en forma de preguntas. Y de nuevo, primero tengo que refutar su declaración y después responder la pregunta. Dice que se ha demostrado que el marxismo, o el sistema marxista, no les proporcionan a las personas lo que necesitan ni les garantizan bienestar. Creo que es exactamente lo contrario. Si comparamos el nivel de vida de los Estados Unidos con el de otros países, tenemos que reconocer que el de los otros países es más bajo, pero cuando habla del modo de vida norteamericano y el mundo libre, tiene que considerar a los 200 millones de latinoamericanos que mueren de hambre, que mueren de enfermedades, que ni siquiera llegan a la edad adulta. Que mueren de hambre en la niñez. Todas esas personas contribuyen a la grandeza económica de los Estados Unidos, que los explota de una u otra forma. Lo mismo ocurre en África, y ocurrió en Asia también. El marxismo le pone fin a todo eso. Mientras estamos asediados por el imperialismo norteamericano no podemos ofrecerle a nuestro pueblo todas las cosas que nos gustaría, pero le hemos dado todo lo que podemos, todo lo que hemos sido capaces de hacer hasta el momento, y sobre una base de igualdad, desde los ministros hasta el funcionario más simple. Y esa es la razón fundamental de que la gente siga luchando por su liberación.
LH: Pero el gobierno de los Estados Unidos está muy consciente de los problemas de la América Latina, y mediante la Alianza está tratando con mucha fuerza de elevar el nivel de vida de las personas en todo el hemisferio. Ahora bien, si las clases gobernantes acuerdan realizar reformas agrarias y reformas tributarias, y si el nivel de vida aumenta, ¿no perdería su efectividad el mensaje de la revolución cubana?
CG: Por supuesto que la perdería de inmediato. El mensaje de la Revolución cubana tiene significado porque, por su propio peso, el imperialismo solo puede realizar reformas tibias que no van a la raíz de los problemas. Si toda la América Latina se liberara de la dominación imperialista, el imperialismo enfrentaría entonces problemas muy serios. Los cimientos del imperialismo son la dominación de los países latinoamericanos mediante el intercambio desigual, el intercambio de productos manufacturados por materias primas, la ocupación de cargos gubernamentales clave a través de las oligarquías nacionales sumisas a los imperialismos.
Si todo eso cambiara, el imperialismo perdería su fuerza. Enfrentaría entonces la crisis general del capitalismo. En otras palabras, la crisis planteada por la clase obrera en su propio país.
Aunque esto no es tan inminente en su país, porque la explotación de las clases trabajadoras se transfiere a la América Latina, África y Asia, pero en ese caso el conflicto se produciría directamente en los Estados Unidos. Obviamente, el mensaje de la Revolución cubana perdería toda su importancia, pero tampoco sería necesario, porque eso es precisamente lo que deseamos para todo nuestro pueblo latinoamericano, y una vez que se lograra, no habría necesidad de seguir lanzando mensajes. No tendrían ningún significado.
LH: ¿Entonces estamos de acuerdo en el deseo de que se realicen esas reformas?
CG: Verdaderas reformas, que permitan el acceso del pueblo al poder. En ese caso, estamos de acuerdo.
LH: Comandante Guevara, ¿cree que eso no se puede producir mediante un proceso evolutivo, sino que tiene que ser resultado de la violencia y de conmociones revolucionarias?
CG: Eso depende, por supuesto, de las clases reaccionarias. Son ellas las que se niegan a ceder el poder, a entregar las riendas del poder. Allí donde las clases reaccionarias insistan en aferrarse al poder en contra de la voluntad de todos, saltará la chispa que puede incendiar a toda la América Latina, y el pueblo llegará al poder.
LH: Comandante Guevara, desde el triunfo de la revolución, la economía cubana, según todas las informaciones, se ha deteriorado seriamente en todos los sectores. La producción industrial, la producción agrícola y la zafra azucarera, que el año pasado cayó a tres millones y medio de toneladas. ¿Cómo explica esta regresión económica?
CG: Bueno, de nuevo la pregunta es una afirmación, así que lo primero que hay que hacer es refutar la afirmación para luego contestar la pregunta. Usted dice que todos los aspectos de la economía cubana se han deteriorado en el curso de la revolución, y yo le digo que se equivoca. La producción industrial creció a partir de 1959, y habría podido crecer mucho más de no haberse visto afectada por la industria azucarera, que en realidad ha decrecido. La producción industrial ha aumentado a un ritmo anual del 7%, sin contar, por supuesto, el azúcar. Y el incremento de 1963 y los estimados para 1964 muestran un porcentaje aún mayor. En 1963 fue de un 10%, y los estimados para 1964 son todavía mayores, y la producción de azúcar aumentará también.
LH: Comandante Guevara, ¿cuando luchaba en las montañas de la Sierra Maestra, preveía que la revolución tomaría un rumbo tan radical?
CG: Lo sentía intuitivamente. Por supuesto, era imposible prever el rápido desarrollo que tendría la revolución. Ni tampoco era previsible la formulación marxista-leninista de la revolución. Eso fue resultado de […] conoce muy bien. Teníamos una idea más o menos vaga de que había que solucionar los problemas que veíamos claramente que afectaban a los campesinos que lucharon con nosotros, y los problemas que veíamos en las vidas de los trabajadores. Pero todo el proceso de la transformación de nuestras ideas sería muy largo de contar.
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
LH: En los Estados Unidos existe la convicción de que el Comandante Guevara fue una de las influencias más radicales de la revolución, y de que arrastró al Dr. Castro hacia la izquierda, que lo que sucedió había sido parcialmente planificado por usted. ¿Lo acepta o lo niega?
CG: Durante mucho tiempo, en los Estados Unidos y en muchos otros países me han hecho el honor de considerarme el cerebro gris de la revolución, el frío manipulador, el izquierdista, el poder detrás del trono. Personalmente, no me preocuparía, pero mi honestidad de revolucionario, mi modestia y mi honestidad innatas me obligan a confesar que el principal izquierdista en Cuba es Fidel Castro, y que el principal peligro para los Estados Unidos en Cuba es Fidel, no yo.
LH: Cuando Fidel Castro dijo en las montañas de la Sierra Maestra que no era comunista, ¿creyó usted que no era comunista y que no se convertiría en comunista?
CG: Yo sabía que no era comunista, pero creo que también sabía que se haría comunista. Igual que sabía en esa época que yo no era comunista, pero que me haría comunista en un plazo breve, y que el desarrollo natural de la revolución nos llevaría a todos al marxismo-leninismo. No puedo afirmar que se tratara de una idea clara y consciente, sino que era una intuición derivada de una evaluación cuidadosa del desarrollo de la actitud de los Estados Unidos y la manera en que su país actuaba en ese tiempo contra nosotros y a favor de Batista.
LH: Si algo le pasara a Fidel Castro, ¿cuál cree usted que sería la suerte de la revolución cubana y quién accedería al poder?
CG: Por su pregunta presumo que se refiere a que le suceda algo violento. Bueno, no puedo negar que sería un golpe muy serio para la revolución cubana. Fidel es nuestro líder indiscutible e incontestado. Ha sido nuestro guía en una serie de situaciones muy, muy difíciles que Cuba ha tenido que enfrentar, y en esos momentos ha dado pruebas de su estatura de líder mundial. No creo que ninguno de nosotros tenga esa estatura, pero hemos adquirido experiencia revolucionaria durante estos años en que hemos luchado a su lado. Somos lo que somos porque hemos asistido con él a la misma escuela, una escuela de valor, de osadía, de sacrificio, de decisión de defender nuestros principios, de análisis de los diferentes problemas. Y creo que en conjunto podríamos, creo, seguir hacia adelante, incluso si algo le sucediera.
En cuanto a quién lo reemplazaría, habría que discutirlo en ese momento. Ahora no podemos darnos el lujo de dedicarnos a los “qué pasaría si…” Ninguno de nosotros tiene ese tipo de aspiración política, pero lógicamente, su hermano Raúl, no porque sea su hermano, sino por sus propios méritos –es el viceprimer ministro—, naturalmente sería el más adecuado entre nosotros para seguir el mismo camino de la revolución cubana.
LH: Comandante Guevara, el Dr. Castro ha expresado con frecuencia su deseo de normalizar las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos. ¿Desea usted que se produzca esa normalización?
CG: Si tiene como base los principios, sí. Y quizás yo más que nadie, porque la industria es la que más sufre a causa del bloqueo. La industria y el transporte son quizás los sectores productivos más golpeados por el bloqueo. El transporte más o menos se ha librado, pero la industria no, y, por tanto, sobre la base de los principios y de una total igualdad, la normalización de las relaciones sería ideal para nosotros.
LH: ¿Es optimista en cuanto a la posibilidad de una normalización de las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos?
CG: Esa es una pregunta difícil de responder. Estamos observando. Estamos esperando. Estamos planificando para una u otra posibilidad, sea cual fuere la que se adopte. Depende de una serie de circunstancias. Las propias características del gobierno de los Estados Unidos. También depende de la manera en que el gobierno norteamericano evalúe la situación mundial. Hasta el momento, su gobierno no ha dado ninguna señal clara de que sepa cómo sopesar la correlación de fuerzas mundial, así que no hay ideas precisas sobre la total normalización.
LH: Ahora haremos una breve pausa y regresaremos en un momento con más ISSUES AND ANSWERS.
LH: ¿Qué le gustaría que los Estados Unidos hicieran con respecto a Cuba?
CG: Es muy difícil dar una respuesta precisa. Como pregunta es poco realista. Quizás la respuesta más franca y objetiva sería: nada. Nada en ningún aspecto. Nada a favor o en contra nuestra. Solo que nos dejen tranquilos. 
LH: Muchas gracias, Comandante Guevara.
(Traducción de Esther Pérez. Tomado de Dialogar Dialogar)
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt

Otros documentos

Descargue otros documentos desclasificados del gobierno de los Estados Unidos relacionados con el Che Guevara

Fotos de Elliott Erwitt

6El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
17El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
16El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
15El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
14El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
13El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
12El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
11El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
10El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
9El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
8El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
7El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt
El Che Guevara en entrevista con Lisa Howard, en el Ministerio de Industrias de Cuba, en 1964. Foto: Elliott Erwitt

En Audio, el diálogo con el Che (audio en inglés)

martes, 4 de octubre de 2016

De Chavez a Juan Bosch


El Comandante Presidente Hugo Chávez en visita al país manifestó que no se regresaba sin conocer al Profesor Juan Bosch. Chávez maravillado con  Bosch, de rodilla y besándole la mano dijo: capitán, capitán de todos los tiempos…
10426653_10204085956787473_194964073796154319_n.jpg

EL DUARTE DE MIGUEL NÚÑEZ

DANIEL BALCÁCER: EL DUARTE DE MIGUEL NÚÑEZ

De  Juan Pablo Duarte  solo se conoce una fotografía hecha en  Caracas  en 1873 cuando el patricio contaba con 60 años de edad.  A...