Aseguró este domingo Oscar Schemel
La oposición hoy es una fuerza electoral pero no una fuerza social y cultural
El presidente de Hinterlaces manifestó que los votos que obtiene la derecha durante procesos electorales en el país no son sufragios a favor de un proyecto de país, sino en contra del presidente Chávez
El presidente del grupo de opinión Hinterlaces, Oscar Schemel, consideró este domingo que la oposición venezolana no es vista en el país como una alternativa frente al proyecto bolivariano, ya que la misma representa una fuerza electoral más no una fuerza social y cultural, como si lo es la Revolución que dirige Hugo Chávez.
Durante el programa José Vicente Hoy que transmite el canal privado Televen, Schemel manifestó que los votos que obtiene la derecha en el país durante procesos electorales no son sufragios a favor de un proyecto de país, sino en contra del Presidente.
“Casi la mitad de los votos de la oposición son votos contra Chávez, son votos contra una gestión, no son votos a favor de una visión de una idea o de una alternativa distinta competitiva con relación a la del presidente Chávez”, sostuvo.
Indicó, en contraposición, que la Revolución Bolivariana es una fuerza política, social y cultural, con el cual las clases populares del país han creado una identidad, ya que visualizan el proyecto socialista como el proceso que brindará las soluciones a los problemas estructurales de la sociedad.
Destacó que la inclusión social ha sido una política que ha fortalecido enormemente al Gobierno Bolivariano, puesto que cada día las y los venezolanos de escasos recursos se sienten con capacidad de tomar decisiones en beneficio de la comunidad.
LA DERECHA NECESITA UNA RENOVACIÓN DE LIDERAZGO
Oscar Schemel consideró que la oposición venezolana necesita un nuevo liderazgo que entienda la realidad del país, que acepte los cambios culturales y comprenda que debe convertirse en una alternativa y no en la representación de un adversario al proceso socialista que vive el país.
Aseveró que ese nuevo liderazgo debe tratar de incluir a los sectores populares en su discurso y construir una visión de país, sin tratar de emular al proyecto bolivariano para lograr adeptos, tal como lo hizo el abanderado de la derecha durante los comicios del 7-O.
“El reto más difícil es para la oposición, que tiene que sintonizarse con los sectores populares en mayor medida, para eso va a requerir de una idea, de una visión de país de una oferta superior al modelo de inclusión, no solamente de una oferta electoral que clona al modelo de inclusión de su adversario y solo promete hacerlo más eficiente”, enfatizó.
El presidente de Hinterlaces opinó que además de una renovación de liderazgo, la oposición debe renovar a sus intelectuales, los cuales se han comportado en los últimos años como agitadores y no como interpretes, limitando con ello la capacidad de las élites para entender las nuevas realidades.
EL CHAVISMO NECESITA A LOS SECTORES MEDIOS
Por otra parte, Schemel aseveró que el chavismo también necesita ampliar su base social de apoyo y podrá lograrlo, a su juicio, a través de la incorporación de las clases medias en las políticas de Estado.
“El chavismo necesita construir ya una hegemonía por consenso y menos una hegemonía por polarización (…) las clases medias pueden ser protagonistas también de este proceso, para ello, tiene que desradicalizar en algunas medidas el discurso, las amenazas a la propiedad privada y el proceso de estatización, a veces exagerado, en las políticas de Gobierno”, aseveró.
Por último, afirmó que la Revolución Bolivariana tiene como reto fundamental entender las nuevas expectativas y demandas, por lo que debe entender que la ciudadanía exige mayor eficiencia y la pronta resolución de los problemas de la sociedad.
TOMADO DE CORREO DEL ORINOCO
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