"Ser Pelédeista es ser un soldado, consciente, valiente y disciplinado" (Consigna del PLD mientras Juan Bosch estuvo al frente de la dirección del Partido)
Por:
José Fernández
Los hombres y mujeres que decidimos acompañar al profesor Juan Bosch en su proyecto político Partido de La Liberación Dominicana, éramos soñadores, románticos, pero sobre todo, éramos amantes de una Patria libre y soberana. Sin injerencia extrañas a los principios Duartianos y de los Padres de la Patria, al igual que los restauradores, que Luperón, Caamaño, Manolo y los Trinitarios. Amantes de una nueva Sociedad, justa y libre, viviendo en Paz y armonía familiar en valores.
Juan Bosch fue calumniado, atacado por articulistas y editorialistas de Medios, con la finalidad, que fuera descalificado políticamente antes un Pueblo que acababa de salir de una Tiranía militar de más de 30 años. Sin embargo, su capacidad de hombre de fe en su Pueblo, con sus palabras claras y precisas se impusieron, y Bosch fue electo Presidente el 20 de diciembre del 1962, venciendo electoralmente con el simple voto popular, al frente oligárquico y a los manipuladores de la verdad y de los intereses nacionales.
Así también, abrazamos en el 1973 los ideales Boschista, los principios éticos y morales que aprobáramos en La Conferencia Salvador Allende y de ahí, salimos un ejercito disciplinado, constituido por hombres y mujeres enamorados de un ideal, de un sueño y con amor patriótico listo a recorrer calles y avenidas, valles y montañas, casa por casa, en caminatas, encuentros con el Pueblo, en Tertulias con el nuevo mensaje del Nuevo Partido creado por Bosch, para organizar, disciplinar y educar, a los hombres y mujeres amantes de una nueva sociedad de un mañana mejor.
En realidad, nos afectó en el trayecto, que El Maestro nos descubrió con una edad un poco avanzada y la adversidades siempre Están en el camino, pero ya había sembrado sus ideas en cada uno de sus discípulos y continuamos avanzando y abriendo caminos al andar, construyendo, educando y organizando y en el tiempo transcurrido, hemos tenido tropiezos, pero también logramos consolidar un gran Partido, con una fuerza electoral capaz de producir convocatorias populares como nunca antes en la historia política dominicana.
Con los triunfos, vinieron los vicios pequeños burgueses, aparecieron los oportunistas que con sus deformaciones, tratando de imponer su características social de accionar, estos, lamentablemente lograron hacer estragos en los cimientos orgánicos, pero, no lograran destruir el instrumento diseñado para fines nobles y revolucionarios como son los principios que asumimos y que juramos defender.
El ejercito Pelédeista militante, sufre las adversidades, nos duele la orfandad de los métodos y la educación, pero continuamos en formación disciplinada, esperando el momento y la coyuntura del momento político, para salir a restaurar la fortaleza orgánica del mejor y más organizado Partido político de América, el Partido de La Liberación Dominicana.